Agenda universitaria de género

Agenda universitaria de género

publicado en EL OBSERVADOR CIENTÍFICO, BELETÍN DE LA UAdeC
Rosa Esther Beltrán Enríquez

La agenda de género que ha comenzado a funcionar en nuestra universidad, es una estrategia institucional que tiene como propósito facilitar la integración de la perspectiva y la transversalidad de género en los programas del trabajo académico y cultural de la universidad planteándose temporalmente objetivos y acciones en función de los avances.

En esta administración, el año pasado, en el Plan de Desarrollo Institucional (PDI) el Rector Mario Alberto Ochoa Rivera planteó a lo largo de todo el documento, un conjunto de propuestas que denotan el propósito de promover permanentemente la cultura de la equidad de género en la universidad.

En el Plan se describe, EL ENTORNO GLOBAL y se señala, entre otros hechos y argumentos, que...”la incorporación de la mujer al mercado laboral, la necesidad de competir más favorablemente en el entorno comercial y mayor interacción con diversos países...Los retos implican contar con mayor capacidad de innovación educativa”...(p.18). Igualmente, el documento establece en la MISIÓN que, “la Universidad Autónoma de Coahuila...contribuye al desarrollo social mediante la formación integral de sus estudiantes favoreciendo las capacidades, habilidades competencias que les permitan...lograr equidad en la sociedad” (p. 23).

Asimismo, en las POLÍTICAS INSTITUCIONALES se plantea como prioridad, “el incremento de la cobertura de los programas educativos, promoviendo el desarrollo y la equidad social” (p. 67), en este apartado destaca que, “Las reformas curriculares de los programas educativos deberán hacer énfasis en los valores, el desarrollo social y humano, la diversidad cultural, el enfoque internacional, el cuidado del medio ambiente, el trabajo de grupo, la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, y el desarrollo pleno e integral de potencialidades humanas” (p.72).

A fin de operacionalizar estos objetivos, el Rector, Mario Alberto Ochoa Rivera ha establecido entre sus prioridades impulsar la equidad de género entre la comunidad universitaria mediante un programa permanente que arranca este semestre y que comprende, una su primera etapa un programa de sensibilización entre la comunidad universitaria, éste incluye talleres, foros, diálogos de intercambio y difusión en línea, etc.

Este periodo permitirá analizar y valorar la situación actual de la perspectiva de género y la transversalidad en las relaciones interuniversitarias y promoverlas desde el aula, en la docencia y la investigación universitaria.

Es común, que en las relaciones sociales cotidianas, la discriminación hacia las mujeres pase desapercibida, se ve como algo normal que en la familia se considere prioritario que los varones cursen estudios universitarios, porque ellos serán los “responsables” de la familia, en cambio las mujeres se casarán y se dedicarán a criar y educar a los hijos y al trabajo en el hogar (aunque esto cada vez es menos cierto).

Por eso muchas mujeres de clase media o baja siguen una carrera universitaria y dicen, “mientras me caso”. En el fondo de esa afirmación está la convicción de que la mujer nació para casarse y tener hijos y si eso no sucede, está incompleta.

Concebir es un hecho biológico que sólo la mujer está dotada para lograrlo, por su sexo, pero, todo lo que acompaña a la maternidad como fenómeno social, es una cuestión de género, una construcción social e histórica, una relación social que puede cambiar, porque no es algo natural sino aprendido. Esto que es tan obvio, está profundamente interiorizado en la conciencia, las conductas y relaciones sociales, se transmite de generación en generación y aceptar que los hombres también pueden hacerse cargo del cuidado de las y los niños y del hogar es algo todavía muy rechazado socialmente, porque lo que se espera del hombre es que sea el proveedor, el fuerte, racional, insensible, estas son las característica que la sociedad asocia al “ser hombre”, es lo que conocemos como estereotipos de género, que en muchos casos engendran discriminación contra las mujeres.

Por ello la agenda de género pretende, consolidar procesos multiplicadores de la perspectiva de género en el ámbito institucional y social, a través de la realización de diversas actividades de sensibilización, investigación, formación de recursos humanos, extensión académica y difusión de los estudios de género, dentro y fuera de la UAdeC e institucionalizar políticas de equidad de género, de investigación y formación, y transverzalizar el currículo desde la perspectiva de género.

Aunque nuestra Constitución (Art. 4ª) establece la igualdad entre mujeres y hombres, ésta no se da automáticamente, porque en la sociedad las relaciones son desiguales y ésta se reproduce en las instituciones, de ahí la necesidad de desarrollar una visión sobre las relaciones, mujeres/hombres con una perspectiva de género que distinga el origen cultural de los problemas que surgen de ellas y plantar alternativas para su resolución.

Es por esto que la Agenda Universitaria de Género que se institucionaliza en esta administración será un detonante para sustentar las prioridades que esta administración ha propuesto, por ello adquiere un carácter urgente.